Indó Mita

El director creativo del proyecto fue el talentoso arquitecto dominicano Raylin Díaz Suárez, cuya visión se unió a la idea de Karina Cortorreal, creadora del proyecto, y al diseño arquitectónico y de interiores de Liza Ortega, para lograr espacios acogedores y de carácter contemporáneo. La fachada, compuesta por las vitrinas de Raylin, anuncia de manera elegante y conceptual los productos de diseño dominicano. En el interior se logra una acogedora atmósfera que gira en torno al arte gracias a la conexión con la naturaleza, la selección de los materiales, el mobiliario y los detalles de origen dominicano que han sido cuidadosamente articulados.

El proyecto Indó Mita surge como una idea de Karina Cortorreal con el objetivo de crear “una galería de puertas abiertas que tenga como misión enaltecer, elevar y promover la moda y el arte dominicanos en todas sus expresiones”. En su primera temporada, Indó Mita presenta colecciones de diseñadores y artistas de nuestro país inspiradas en Jorge Pineda. Estas colecciones se basan en la exploración y la colaboración entre el diseño y el arte. Se trata de un homenaje al trabajo y la trayectoria de este artista dominicano cuyas obras han sido expuestas en galerías y museos de todo el mundo y que hoy en día forman parte de importantes pinacotecas. Los diseñadores escogidos para esta primera colección fueron Maylé Vásquez, Jusef Sánchez, Carolina Socías, Mónica Varela, Carolina Sanz y Casa Alfarera.

El objetivo principal es promover a los diseñadores emergentes, pero en esta primera temporada se trabajó con autores reconocidos a los fines de establecer el proyecto. El cien por ciento de los beneficios de Indó Mita será dedicado a la sostenibilidad de la galería y a la creación de un fondo de apoyo para diseñadores emergentes. Además de los productos de los diseñadores locales, Indó Mita tiene su propia colección de objetos. El primer producto lanzado fue el bolso de pajilla y piel que diseñaron para esta temporada, en diferentes colores y formatos. La manufactura estuvo a cargo de la casa Fiori dominicana. El proyecto se propone constituir un canal de ventas físico en el que los clientes tendrán la posibilidad de familiarizarse con la materialidad de las piezas. Esta presencia física será complementada con un canal de exhibición y venta virtual. Así, la experiencia digital expandirá el potencial impacto de las marcas.

El diseño de la envolvente y espacial del proyecto fue pensado como un lienzo sobre el cual se destacan las piezas de las colecciones que allí se exhiben. Se privilegió el uso de materiales locales, como los mosaicos de cemento de Aguayo y el mobiliario construido por Casa Mobel y Marmotech. Se incluyeron también materiales duraderos y que aportan elegancia al conjunto, como el krion que reviste la fachada. Se eligió una paleta de colores neutros, en tonos de grises, para que el color lo aporten las obras de arte y las piezas de la colección. Solo se utiliza el amarillo como acento de color en lugares muy específicos, como, por ejemplo, las cortinas que definen los probadores tipo atelier.

El diseño de la fachada resulta de conjugar la abstracción de una casa colonial y una galería de arte. Un lado de la fachada evoca los típicos arcos de las casas coloniales, que en este caso fueron alargados para producir más espacio de vitrina. El otro lado se presenta como un lienzo en blanco en el que solo se coloca discretamente el logo de la marca. La vitrina de esta temporada fue diseñada por el arquitecto dominicano Raylin Díaz, y anuncia de manera elegante y conceptual los productos dominicanos. Se incluyen en este diseño los colores que los dominicanos llaman mamey y morado obispo (naranja y violeta). Esta vitrina cuenta también con unas esculturas en honor a Jorge Pineda, elaboradas por el artista santiaguero Freddy Pérez.

El diseño gráfico y la identidad de Indó Mita estuvo a cargo de los dominicanos Glenys Anglada y Carlos Pión; la separación de la palabra transmite el concepto de puertas abiertas, un lugar en el que todo el mundo es bienvenido. Por su parte, el logotipo surge de una abstracción de la cruz, elemento característico de la bandera dominicana. Este icono se utiliza como patrón en varios elementos del proyecto, como la fachada y el mostrador principal. En el catálogo de mosaicos de Aguayo se encontró un diseño bastante similar al desarrollado por los artistas gráficos, por lo que se personalizó con los colores del proyecto para utilizar en pisos y paredes, aportando el acento de color que se buscaba.

• Planta de conjunto y primer nivel