Rab Messina, consultora de comunicación y mercadeo, abre la puerta del singular hábitat donde vive y trabaja. A través de su colección de objetos funcionales y de arte adquiridos en sus viajes, Rab, amante de la arquitectura y el buen diseño, deja entrever su sensibilidad y su auténtica personalidad de trotamundos.
Desde hace un tiempo se propuso encontrar un lugar donde pudiera sentirse aislada del caos de Santo Domingo. La distribución interior es bien compacta; consiste en un espacio abierto de sala y comedor con cocina integrada, junto a dos habitaciones con sus baños (una de ellas convertida en estudio). Ambos baños lucen el típico piso de losa rota de Sao Paulo (su ciudad favorita) y sus paredes son de cemento pulido, al estilo de la arquitecta ítalo-brasileña Lina Bo Bardi (1914-1992).
Cual museo tradicional, casi todas las paredes son blancas con excepción de una que tiene un papel tapiz (con tema tropical), las cuales contrastan con el piso de porcelanato mate de color oscuro.
El tratamiento interior fusiona varias tendencias decorativas: lo ecléctico, lo vintage y el estilo propio de su creadora y usuaria, que se refleja en una colección de curiosos objetos que provienen de sus viajes por todo el mundo: Corea del Sur, Canadá, México, Estados Unidos, entre otros.
Para Rab, estas piezas adquieren otra funcionalidad al entrar a su casa, a la vez que representan (quizás de forma inconsciente) el rechazo a lo desechable y a la cultura de la inmediatez de la sociedad moderna.
El mobiliario también resulta muy peculiar. En el conjunto se encuentra desde una pieza icónica como el diván y la otomana de Charles Eames, un asiento rescatado de un teatro local, un bebedero antiguo, sillas campestres alemanas, hasta un pupitre escolar norteamericano de la década de 1930. Además de varios objetos de diseño, se exhiben pinturas de las artistas dominicanas Laura Castro, Tania Marmolejo y Mónica Lapaz.
Rab Messina es consultora de comunicación y está especializada en creación de contenido de marca –libros, revistas, blogs corporativos, páginas web y estrategias de construcción de marca–. Está cansada de que le pregunten si es arquitecta (no). Está cansada de que le pregunten si es Mónica Belluci (su prima lejana). Lo que nunca le cansa es cuando la gente piensa que Rab es un nombre de hombre y le dicen «manín» por WhatsApp.
