El emblemático restaurante Playa Blanca del complejo Punta Cana reinauguró sus instalaciones en noviembre del 2018.
Tras tres meses de remodelación presenta una estructura con un diseño de vanguardia, que se acompaña de elementos tradicionales como la cubierta de cana. Posee nuevos ambientes, siempre abiertos al mar Caribe, cuyo diseño de interior magnifica el privilegiado entorno a la vez que aporta dinamismo y elegancia a estos espacios.
Playa Blanca, desde su apertura en el 2009, ha sido el restaurante de playa insignia del Punta Cana Resort.
En diciembre del 2017 se produjo un incendio en sus instalaciones que implicó la reconstrucción del restaurante. Acompañan a la estructura nuevos ambientes cuyo diseño de interior —ejecutado por Rafael Selman y Asociados— conjuga lo elegante con lo rústico.
Se mantiene el diseño de la llegada al lugar. Sobre una pared revestida con una textura ondulada se coloca el logo del restaurante. Desde este primer elemento se asoma el color rosa intenso. Este será el principal acento de color utilizado en el diseño de interiores y gráfico donde predominan los colores neutros.
El diseño de la estructura se inspira en unas piezas de barro esmaltado de un pez alado, del artista Thimo Pimentel, que sobrevivieron el incendio. La intención fue la de conjugar lo rústico con lo contemporáneo de manera elegante. La estructura se compone de tres techos a dos aguas, unos curvos y otros tipo “cara de monja». Estos techos se soportan con columnas cilíndricas y vigas metálicas laqueadas de blanco. Para las correas se eligió el bambú por su gran flexibilidad.
Una novedad es el bar en la playa que se comunica con el restaurante a través de una pasarela curva de madera sintética. Se mantiene el concepto de estos espacios en estrecha relación con el exterior por su materialidad y apertura, siempre cuidando la privacidad.
El diseño de interiores mantiene el mismo concepto del diseño arquitectónico de contraste entre lo típico y rústico con lo contemporáneo y elegante. Las piezas del mobiliario son de diseño elegante y estilizado. Se eligen tonos neutrales con seleccionadas piezas con acentos de rosa intenso, que hacen referencia al logo del restaurante, y de azul turquesa, en referencia al color típico del mar de Punta Cana. Se han seleccionado diferentes estilos con la idea de crear distintos ambientes dentro del mismo restaurante.
El piso de madera aporta calidez al ambiente. Se incluye también la piedra coralina, material típico de la zona, para recubrimiento de algunas paredes.
En la playa se ha creado un ambiente con sillas de PVC de color rosado intenso, una interpretación moderna de las tradicionales butacas de madera del tipo “haraganas». Estas sillas se acompañan con mesas blancas de PVC de diseño contemporáneo.
Restaurante Playa Blanca (2018)
- Ubicación: Punta Cana, La Altagracia
- Área de construcción: 1,115 m2
- Diseño arquitectónico: Antonio Segundo Imbert, Simples Arquitectura
- Diseño de interiores: Lashmi Desangles, Selman y Asociados
- Colaboración: José Carlos Martínez
- Consultor Estructural: José Miguel Hernández (Ingeniería Metálica), Emilio Olivo Batista (PIIAU), Coopbambú
- Consultor Eléctrico: Iván Jiménez (STM)
- Consultor Sanitario: Magda Duarte (Proyecto VDA).
- Paisajismo: Natalia Franch, Bosques Urbanos
- Contratista general: DUPLA