Compuesto por un hotel Four Seasons Hotel and Residences en la primera fase, el proyecto Tropicalia, concebido por Cisneros Real Estate, se erige como un modelo de turismo sostenible al integrar lujo con responsabilidad ambiental en un sitio virgen de espectacular y diversa belleza natural en playa Esmeralda (Miches). El hotel, cuya apertura está prevista para 2026, fue diseñado por Isay Weinfeld, un reconocido arquitecto brasileño de prestigio internacional. La arquitectura combina la modernidad tropical con la inspiración en elementos de la arquitectura dominicana. Paralelamente al desarrollo de la infraestructura, la Fundación Tropicalia promueve el bienestar de la comunidad local mediante programas de educación y equidad de género que benefician a miles de personas. Con un enfoque en la participación local, el proyecto involucra artesanos y proveedores en su desarrollo.
La idea de desarrollar un proyecto turístico de lujo como Tropicalia en playa Esmeralda nació de la singular belleza natural de la región, donde la biodiversidad y el entorno vibrante invitan a soñar en grande.
Tropicalia es un sueño hecho realidad de Cisneros Real Estate, que busca entrelazar el turismo de lujo con un firme compromiso con el desarrollo sostenible, un pilar fundamental de la filosofía empresarial del grupo. Cisneros ha mantenido una relación con la República Dominicana durante décadas, la Fundación Tropicalia ha llevado a cabo iniciativas que han impulsado el crecimiento de Miches, programas de inclusión social y protección ambiental. La espectacularidad de playa Esmeralda inspiró la creación de un proyecto turístico innovador y de clase mundial.
De acuerdo con lo expuesto por el arquitecto Rodrigo Rubio, vicepresidente de diseño y construcción de Tropicalia, en una entrevista exclusiva con el equipo de revista Arquitexto: “uno de los componentes del desarrollo del Four Seasons Resort & Residences es tanto su enfoque de baja densidad y bajo impacto como la vinculación del mejor talento local y global en su equipo consultor”. Esta estrategia refuerza la visión integral del proyecto y garantiza el avance coordinado de las diversas iniciativas en curso.
Las extraordinarias características del paisaje dominicano y la cultura arquitectónica del país han tenido una influencia significativa en el diseño del proyecto. Los bosques tropicales, con sus especies maravillosas como los dragos, las impresionantes playas de la bahía de Samaná, los cuerpos de agua a lo largo de la costa, junto con las suaves elevaciones de la zona y la omnipresencia de la Cordillera Oriental en el horizonte, constituyen una riqueza natural única que ha inspirado al equipo de diseño.
Frente a este paisaje excepcional, Tropicalia responde con una estrategia de diseño “dispersa”, compuesta por edificios de pequeña escala y baja altura que se integran de forma delicada y cuidadosa en el entorno y restauran la experiencia original del bosque húmedo tropical. Esta estrategia se complementa con la restauración del bosque primario en áreas previamente ocupadas por plantaciones de cocos, con especies endémicas que restablecen el equilibrio ambiental y biológico. La vegetación proporciona sombra y se combina con una arquitectura que incluye aberturas profundas, muros perforados y cubiertas extendidas, lo que potencia la conexión con el paisaje circundante. Además, Tropicalia se encuentra en un santuario marino, hogar de ballenas jorobadas y tortugas tinglar. Su conservación es una prioridad, por lo que la iluminación nocturna se ha ajustado para proteger la orientación de las tortugas durante sus procesos de anidación. Para esos fines se distanciaron los bolardos en los caminos de arena y se cambió la temperatura de color a un tono más cálido de 2,200 K. Todas las luminarias seleccionadas están diseñadas para evitar el deslumbramiento.
El arquitecto brasilero Isay Weinfeld, encargado del proyecto, es reconocido mundialmente por su habilidad para sintetizar el trópico latinoamericano. Su enfoque integra todos los aspectos de la experiencia espacial, desde la planificación general hasta el diseño interior, el mobiliario y los accesorios. Isay es un destacado exponente de la arquitectura tropical moderna que con su trabajo inspira a arquitectos de toda América Latina. En su proceso creativo, Weinfeld llevó a cabo un extenso recorrido por el paisaje dominicano, sus ciudades y poblados, observando la volumetría, los materiales, los colores y las texturas de la construcción local. Esto le permitió entablar un interesante diálogo con la historia, la cultura y la arquitectura del país que enriqueció la propuesta arquitectónica y estableció un vínculo con el entorno.
Plan maestro
El plan maestro de Tropicalia incluye en su fase inicial un hotel de 95 llaves con acceso a una serie de recintos sombrados que guían el recorrido hacia los diferentes pabellones de servicio al huésped. Desde la recepción, que cuenta con un bar de destilados y una terraza en el segundo piso, hasta el edificio del restaurante principal se produce una conexión fluida con el complejo de piscinas y el bar de ceviches, que aporta luz, brisa y vegetación a la experiencia del visitante. El recorrido se articula bajo una cubierta continua desde la cual se accede a los múltiples componentes del programa, los cuales se descubren gradualmente a través de una serie de muros perforados que delimitan la escala del lugar. De esta manera, los campos deportivos, el gimnasio, el spa, el edificio de eventos, el bar de jugos, los cafés, los restaurantes y los espacios para niños y jóvenes se van revelando sutilmente a medida que el visitante avanza. Esta configuración espacial se complementa con dos edificios de 16 residencias y nueve villas de playa que se vinculan con destreza al conjunto.
La baja densidad ha sido uno de los aspectos claves para lograr el equilibrio ambiental en Tropicalia. La huella de construcción es de apenas un 6.8% del área total del terreno, lo que permite que el paisaje predomine sobre la edificación. Con esta medida se logró conservar el 67% del área y proteger los fragmentos del bosque primario que aún se encuentran en aquellas zonas.
Entre las estrategias utilizadas para minimizar el impacto ambiental se destaca la ubicación de construcciones a una distancia significativa de la línea costera, lo que protege el entorno de playa y mejora la resiliencia ante eventos climáticos extremos. Además, se implementó un sistema de dunas de protección para mitigar la intrusión de agua durante estos eventos. En cuanto al suelo natural, se conservó la capa vegetal del área intervenida para reintegrarla en el desarrollo paisajístico y se trasplantaron cuidadosamente cientos de especies protegidas, así como una selección de árboles «heroicos» que se ubicarán estratégicamente a lo largo del recorrido. “El paisajismo de Tropicalia se perfila como uno de los elementos más destacados del proyecto”, afirma el arquitecto Rubio.
Una de las acciones más desafiantes ha sido el extensivo mejoramiento de suelo para asegurar la estabilidad de las distintas edificaciones. Para ello se han utilizado tecnologías innovadoras basadas en la compactación dinámica. El proyecto incorpora diversas prácticas sostenibles desde sus fundamentos, como la selección de materiales que reducen la huella de carbono. Se implementan sistemas pasivos de clima, como cubiertas y muros perforados, que favorecen el balance térmico natural. Además, se diseñan envolventes arquitectónicas de alto desempeño para minimizar el uso de climatización artificial, y se incluyen sistemas de energía solar para complementar la energía eléctrica. Otro aspecto fundamental es la realización de un estudio de balance hídrico que abarca el acopio y reciclaje de agua para garantizar un uso cuidadoso del recurso.
Propuesta arquitectónica
Sobre el concepto arquitectónico, Rubio explica que con la selección de Isay Weinfeld como arquitecto para la primera fase, Tropicalia introduce no solo arquitectura de clase mundial, sino una interpretación delicada y elegante del concepto de modernidad tropical. “Esta arquitectura inmersa en el paisaje invita a descubrir el lugar, sin soluciones lineales ni repetitivas. La propuesta busca lo esencial, que realza el entorno en lugar de imponerse”.
La arquitectura de Tropicalia no está determinada únicamente por la función. Su punto de partida se basa en una profunda certeza sobre las bondades de la baja densidad y la integración ineludible con el contexto local. Se percibe la contundencia de las formas arquitectónicas de la historia dominicana, así como la presencia de la piedra coralina en la arquitectura colonial, lo que contribuye a un sentido sugestivo del espacio y el tiempo que el proyecto homenajea. La preocupación por la luz natural, el manejo de las brisas, la lluvia, el paisaje, los sonidos del bosque tropical, las superficies y texturas, junto con una paleta de color sobria, son las guías del diseño atemporal de Isay Weinfeld. Su destreza en el desarrollo integral, desde el plan maestro hasta el último detalle del mobiliario, ofrece una experiencia sensorial que sorprenderá a cada visitante de Tropicalia. Su versatilidad como arquitecto premiado y diseñador de mobiliario y accesorios le permite lograr un resultado innovador, responsable ambientalmente, y único.
“La arquitectura de Tropicalia intuye de forma íntima lo que significa el diseño en el trópico. Nuestros arquitectos son virtuosos conectando recorridos, secuencias y momentos que permiten aproximarse al lugar de forma muy personal. Los muros de las catedrales coloniales, el ladrillo centenario, la textura pétrea y las maderas nobles son piezas fundamentales en la aproximación al proyecto. Weinfeld ha integrado estos elementos sobre el lienzo del trópico dominicano de una manera innovadora y perdurable”, sintetiza el arquitecto Rubio sobre el proyecto.
Comunidad y responsabilidad social
Desde su concepción, Tropicalia ha reconocido la importancia de integrar a la comunidad local. En 2008 se creó la Fundación Tropicalia, que promueve el bienestar de los habitantes de Miches a través de iniciativas de educación, equidad de género, participación económica, identidad cultural y conciencia ambiental. A lo largo de 15 años se han desarrollado programas innovadores que benefician a la comunidad, como son Miches Emprende y «Soy niña, soy importante». Este último programa, que apoya a niñas y adolescentes, ha sido un referente nacional.
La comunidad local también se ha involucrado en el desarrollo del proyecto con su creatividad y capacidad emprendedora. Tropicalia ha establecido un inventario de artesanos y consultores dominicanos que son clave en el diseño y ejecución del proyecto. Además, promueve la incorporación de personal local en las operaciones y construcción, y se están identificando proveedores locales para integrar la oferta gastronómica cuando comience la operación. Tropicalia forma parte de Promiches, una institución dedicada al desarrollo del nuevo polo turístico de Miches y participa activamente en iniciativas como Protortuga, que protege la tortuga marina y sus zonas de anidamiento.
FOUR SEASONS HOTEL AND RESIDENCES TROPICALIA
Ubicación Playa Esmeralda, Miches. Diseño arquitectónico y de interiores Isay Weinfeld. Desarrollador propietario Cisneros, Tropicalia. Codesarrollador y project manager Sinergo. Constructor Bouygues. Arquitecto ejecutivo Gensler. Arquitecto de registro local Pérez Morales. Superficie de construcción 46,000 m2. Superficie del lote 521,580 m2. Paisajismo EDSA, Massiel Mejía. Ingeniería Civil Luis Abbott, Norberto Rojas. Sistemas técnicos Quasar, Guillermo Santoni (AS Electricidad). Infraestructura Epsalabco