Arquitectura e inclusión: Definición y Categorización del tema.
1. Definición del tema.
Por definición, la inclusión es la acción de tomar elementos y hacerlos parte de un todo, para así elaborar una respuesta hacia ellos, en función de una idea o propuesta.
Pero situando este término dentro del contexto urbano, según la UNESCO, la inclusión, es un enfoque que responde positivamente a la diversidad de las personas y a las diferencias individuales, entendiendo que la diversidad no es un problema, sino una oportunidad para el enriquecimiento de la sociedad, a través de la activa participación en la vida familiar, en la educación, en el trabajo y en general en todos los procesos sociales, culturales y en las comunidades.
De acuerdo a este planteamiento, podemos hablar de «Ciudad Inclusiva», la cual debe estar concebida con el fin de crear un mundo más equitativo y más respetuoso frente a las diferencias, beneficiar a todas las personas independientemente de sus características, sin etiquetar ni excluir y proporcionar un acceso equitativo, haciendo ajustes permanentes para permitir la participación de todos, valorando el aporte de cada persona a la sociedad.
Es por tanto, que dentro de una ciudad inclusiva, la arquitectura juega un rol fundamental, pues de igual manera, debe basarse en una comprensión integral y sostenible de las responsabilidades que conforman el entorno construido en relación a aquellos que lo pueblan. También debe plantear posibilidades de accesibilidad integral al medio físico para todas las personas, que puedan hacer uso de los espacios que conforman el entorno construido con autonomía e independencia.
2. Puntos de vista de diversos autores.
En torno a este tema, existen múltiples opiniones de ciudadanos que viven, analizan, critican, ayudan, construyen… la ciudad.
Basándonos en entrevistas realizadas a diversos profesionales en áreas de medicina, arquitectura, contabilidad, derecho, entre otras tantas, sus punto de vista coinciden en que una ciudad inclusiva es aquella que garantiza el derecho de ciudadanía de sus habitantes, procura las condiciones para que los ciudadanos desarrollen sus proyectos en condiciones de equidad, iguala a los ciudadanos protegiéndolos cuando se encuentran
en situación de precariedad o desventaja, promueve la mejora de las condiciones personales y familiares y remueve los elementos del entorno que dificultan su desarrollo.
Plantean que las ciudades inclusivas, se construyen pensando en adaptarse a las necesidades y aspiraciones de las personas y no que las personas sean las que se deban adaptar a las ciudades.
La exclusión es una realidad existente para los grupos minoritarios y ésta limita sus posibilidades de interacción, de accesibilidad a los servicios a los que tienen derecho y sus oportunidades de desarrollo.
Según el arquitecto argentino Rodrigo Ballina Benites, la educación tiene un papel clave que desempeñar en el logro de la transformación social y económica de nuestra sociedad, sin la cual la construcción de un compuesto cultura y sociedad incluyente seguirá siendo un sueño lejano.
Por otro lado Renato Baires, un estudiante de arquitectura y crítico de arte, plantea que la arquitectura naturalmente debe ser inclusiva, debe ser para todos, no para unos pocos. Aunque hoy en día solo se hace presente en manos de quién económicamente puede sustentarla.
3. Categorización del tema.
En el ejercicio de la Arquitectura y el urbanismo podemos generar categorías en términos de inclusión, en diversos aspectos como:
– Inclusión social
– Inclusión económica
– Inclusión de género
– Salud
– Educación
– Inclusión política
4. Aspectos que involucra.
Para entender como incide o como se practica la inclusión en una ciudad, es primordial conocer los cambios que hacen posible la existencia de factores que favorecen la exclusión, es decir, verlo desde un punto contrario. Los cambios producidos en nuestra sociedad impidiendo la inclusión son: los cambios en la estructura familiar y las formas de convivencia, en la pirámide de edad: envejecimiento y dependencia, en la composición étnico cultural y religiosa, en el ámbito económico productivo, en el mercado de la vivienda, sociales e institucionales, entre otros.
a) Factor social: es el que trata el comportamiento humano en la sociedad y su interacción con la ciudad. Es el núcleo de todos los factores tratados a continuación, es decir, es donde se conglomeran.
b) Factor económico: atiende a todas las clases sin importar su estatus, si el ciudadano está empleado o no. La inclusión económica debe sustentar a cada habitante sin distinción.
c) Factor cultural: si una raza se define por sus rasgos físicos diferentes a los del grupo dominante y no participa o no se integra por decisión propia o son relegados expresamente por el grupo dominante se llama exclusión étnico-cultural.
En cuanto a esta problemática, la inclusión se encarga de tomar en cuenta las distintas costumbres, dando participación a quienes poseen una cultura diferente a la de la población mayoritaria.
d) Factor salud: la inclusión aboga para que cada ciudadano tenga accesibilidad a atenciones médicas y disposición de medicamentos sin verse afectado por la sombra económica del individuo.
e) Factor educación: el acceso a una educación de calidad es elemento primordial que trata la inclusión.
f) Factor urbano: la ciudad más que un espacio físico, es un escenario de vida donde se lee el pasado y se vive el presente, el planteamiento de una ciudad inclusiva de calidad como tejido urbano que garantice accesibilidad e igualdad sin discriminación, sin límites psicológicos y sin una violación constante al espacio público y al peatón.
a) Factor territorial: la inclusión trabaja para cubrir la falta de equipamientos dentro de la ciudad, la degradación del espacio urbano, el mal planteamiento de soluciones dentro de la ciudad permitiendo la movilidad del hombre en la misma y en efecto que se desarrolle sustentablemente. El espacio urbano ha de adecuarse para poder satisfacer las necesidades y las expectativas de todos los ciudadanos sin ningún tipo de discriminación.
5. Conclusión personal.
La ciudad es de todos y para todos, por tanto la equidad de oportunidades y participación para cada uno de sus habitantes es el elemento primordial en la creación de una ciudad inclusiva, que brinda servicios, seguridad, educación, esparcimiento, empleo, entre otros tantos aspectos, a una sociedad que requiere ser tratada sin diferencias, que pide a gritos una transformación social y económica que no aventaje a ningún sector urbano.
La inclusión acondiciona la ciudad, como un gran contenedor físico, que plantea una dinámica social colectiva y multifuncional para que el individuo pueda hacer uso pleno de la capacidad instalada de la infraestructura urbana y los servicios múltiples.
Ante toda esta perspectiva, la inclusión es el camino que permite y practica el reconocimiento de la diversidad en nuestra sociedad.
Es vital que la arquitectura como respuesta física a las necesidades del ciudadano, sea el motor que promueva una sociedad participativa y justa.
Nuestra profesión está en capacidad de generar los elementos, tangibles o intangibles, que crean la diferencia entre una ciudad incluyente y una ciudad excluyente.
“Una ciudad inclusiva no es solo socialmente justa, sino también buena para el crecimiento y el desarrollo sostenible.” Anna Kajumulo Tibaijuka.
Bibliografía.
- Artículo periódico hoy: «Para una ciudad inclusiva». Amparo Chantada.
- Artículo Ciudad Inclusiva y tercera edad por el Arq. Eduardo Schmunis.
- Inclusive Design: creating a user´s world. RIBA.
- Blog Agenda Hábitat.
- Blog Volando en dobles Alturas.
Este artículo forma parte de una serie de artículos en Aula-x
- UNPHU – Arquitectura e inclusión – Parte 1
- UNPHU – Arquitectura e inclusión – Parte 2
- Arquitectura e inclusión – Parte 3