Gerdau Metaldom

A partir de este conocimiento, el proyecto de diseño de sus nuevas oficinas se concibió como la fusión entre el espacio de carácter industrial transformado en una nueva interpretación de workplace que transmite innovación, optimización, acogida y, ante todo, una nueva identidad visual que aplica los principios de sostenibilidad e inclusión como parte de la visión de la empresa.

El nuevo proyecto de oficinas Gerdau Metaldom, iniciado en el año 2019, se encuentra ubicado en el parque industrial Duarte, uno de los más grandes de la República Dominicana, situado en las afueras de Santo Domingo. El espacio para intervenir era una nave metálica existente en un entorno industrial, con una extensión total de 1,800 metros cuadrados y nueve metros de altura, una especie de “canvas expuesto” que brindó la oportunidad a los proyectistas de plasmar un nuevo concepto y diseño. La nave era utilizada como almacén de maquinaria pesada, sin preexistencia alguna de espacios de oficina o trabajo administrativo.

Historia base y primera intervención: base conceptual del proyecto y detalles que permanecen

La base conceptual del diseño de las oficinas administrativas de Gerdau Metaldom consiste en tres términos claves: fabricación, industrialidad y fundición. Con una trayectoria de más de 54 años (48 como Metaldom y los últimos 6 como Gerdau Metaldom) la empresa tiene como fin continuar siendo un referente en la República Dominicana como proveedor de herramientas y materiales con la capacidad de ejecutar todo tipo de diseños a base de acero y metal. Ante esto resultó crucial plantear un diseño que comunicase este concepto general a través de la utilización de dichos materiales para la creación de nuevas formas y texturas en el recorrido por la obra.

Es por esto que la esencia del proyecto fue diseñar a partir de lo existente, dando lugar a una intervención que utiliza un nuevo lenguaje de los materiales. Desde un inicio se trabajó con el área industrial existente, incluyendo en el diseño los tonos recogidos en el espacio así como la materialidad de muros y pisos. El pavimento de hormigón visto fue conservado, restaurado y tratado con una terminación pulida en toda la extensión de la planta, en su calidad de material industrial característico y a su vez elemento unificador dentro del diseño general.

El programa de áreas del proyecto debía acomodar alrededor de 120 personas de distintos departamentos, proporcionándoles una mezcla diversa de espacios inspiradores con gran visibilidad, destacando la colaboración y la agilidad con la que se caracteriza dicha empresa. Espacios innovadores de reunión como one to one, innovation lab y coffee break son algunos de los puntos integrados a la planta general que dan soporte a un workplace creativo en el que fluye de manera constante el diseño y la integración de los equipos de trabajo. Tales espacios juegan en su dimensión destacando según su capacidad y visibilidad las actividades realizadas en cada punto.

Apoyado en esta idea, el diseño cromático jugó un papel importante en su calidad de complemento de los espacios al trazar diversos recorridos y definir destinos en la planta, de acuerdo con sus funciones y siempre sujeto a la identidad visual ya definida por la empresa, una paleta de colores que parte de tonos principales amarillo y azul, en armonía con otros como verde, rojo y naranja. Además de constituir un aporte a la propia identidad corporativa, este juego cromático genera espacios de trabajo más vívidos.

La organización general de las instalaciones se define a través de un open plan que maximiza el área flexible de la edificación tomando en cuenta la actual situación de pandemia y reenfocado hacia una nueva generación de oficinas. Dentro de la planta se ubican distintos departamentos que se conciben espacialmente como “barrios” y conexiones hacia estos que se plantean como “calles”, definiendo así distintos puntos que se entrelazan y juegan entre los llenos y los vacíos, diferenciados por medio de color, densidad, función y señalética.

Las mamparas inspiradas en la obra cubista Composición II en Rojo, Azul y Amarillo realizada en 1930 por Piet Mondrian, compuestas por una retícula metálica y cristales laminados de diversos tonos, son uno de los detalles que enfatizan un nuevo juego de formas y acentúan la flexibilidad y creatividad plasmada en cada espacio. Todo el conjunto está enlazado por trazos que utilizan la misma paleta de colores y recorren toda la planta hasta llegar a los distintos espacios como aporte estético, de señalización y direccional dentro de las oficinas.

• Plantas de conjunto y niveles 1 y 2